Rodillos cerámicos de SiC

Los rodillos cerámicos de SiC tienen una excelente resistencia al desgaste y pueden soportar alta presión y fricción sin perder la calidad de la superficie. Su dureza es cercana a la del diamante, lo que le permite reducir eficazmente el desgaste por contacto con materiales metálicos y extender la vida útil del rodillo. El bajo coeficiente de fricción de los rodillos cerámicos de SiC también reduce la pérdida de energía y la generación de calor, lo que mejora la eficiencia de la producción.

Además, los rodillos cerámicos de SiC tienen una excelente resistencia a altas temperaturas. Puede funcionar de forma estable en entornos de alta temperatura sin ablandarse ni deformarse. Esto hace que los rodillos cerámicos de SiC sean muy adecuados para procesos de procesamiento a altas temperaturas, como el laminado en caliente de metales y la fundición continua, lo que garantiza que los rodillos mantengan un excelente rendimiento y estabilidad dimensional bajo temperaturas extremas.

Los rodillos cerámicos de SiC también tienen una excelente resistencia a la corrosión. Puede resistir la erosión de productos químicos como ácidos, álcalis, disolventes y gases corrosivos, manteniendo el acabado superficial y la funcionalidad de los rodillos. Esto hace que los rodillos cerámicos de SiC funcionen bien en aplicaciones como procesamiento químico y galvanoplastia, extendiendo la vida útil de los equipos y mejorando la calidad de la producción.

Las características livianas de los rodillos cerámicos de SiC les brindan excelentes características de inercia y capacidades de reducción de vibraciones, reduciendo así la vibración y el ruido, mejorando la estabilidad del equipo y la comodidad de operación. Sus dimensiones precisas y su superficie plana garantizan la estabilidad y suavidad del rodillo, proporcionando excelentes resultados para procesos de trabajo de metales e impresión.